Ayer lunes 13 de enero de 2014 comencé una pequeña colaboración en Radio Nacional de España. El microespacio se llama "Alborada" y viene a ser como un "buenos días con alegría"; la cosa está en encontrar los motivos para la alegría, para la esperanza, para sacarle a la jornada todo su jugo. En eso estamos. Se emite por el 92.1 (creo) y vía internet en www.rtve.es a las… 5.55 de la mañana… Así que iré compartiendo en este blog -al menos hasta que estén disponibles los podcasts- los comentarios matutinos. Aquí va el primero.
Alborada. 13-1-2014. RNE.
"Buenos días querido oyente. Dado que vamos a compartir algunas reflexiones matutinas en los próximos meses -o al menos así lo espero- me permito presentarme brevemente. Me llamo Julián Lozano, tengo 35 años, soy sacerdote y periodista, nacido en Madrid, vivo en Getafe y sirvo en la Parroquia de Ciempozuelos. Creo que con esto vale. Bueno, debo añadir que estoy encantado de estar en esta alborada, y de comenzar el día conjugando algunas palabras, que espero puedan servir para bien. Vayamos a ello.
Aunque pueda parecer que ya quedan lejos las celebraciones navideñas, lo cierto es que el tiempo litúrgico de Navidad no concluyó hasta ayer, cuando celebramos el Bautismo de Jesucristo en el río Jordán. Y quiero comenzar esta andadura radiofónica retomando una de esas felicitaciones que todos recibíamos en los días pasados. El mensaje en cuestión -que me lo mandaban mis amigos del Curso Alpha- venía en forma de árbol navideño. Pero no estaba hecho de hojas, sino que su perfil lo trazaban las siguientes preguntas: ¿Qué es una moto sin gasolina? ¿Y un sms sin contenido? ¿Y un bar sin copas? ¿Qué te parece un pájaro privado de sus alas? ¿Y una fiesta sin música? ¿O un brindis sin amigos? ¿Unos patines sin ruedas? La secuencia de preguntas concluía con esta última: ¿Y una Navidad sin Jesús?
La respuesta común a todas estas cuestiones podría ser: “una pena”. Una lástima tener cosas buenas a las que no le saco todo el partido.
Ojalá, querido oyente, hayas disfrutado de las recientes fiestas navideñas. Ojalá las hayas aprovechado y hayan sacado lo mejor de ti. Pero quiero hacerte una propuesta: ¿Qué te parece si ese “espíritu navideño” que nos hace mirar la vida con más luz, con más fe, con más amor, lo estiramos durante todo el año? Estoy seguro de que vale la pena intentarlo. Vamos a por este 2014 recién estrenado con el mejor ánimo. Seguro que puede ser un año de gracia. Feliz lunes.
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